viernes, 25 de agosto de 2006

Mas vale tarde...

Me pidió que le escribiera, y prometí que lo haría. Dejé pasar el tiempo para no quedar como un ansioso. Después empecé una carta pero no la terminé. Escribí otra y fueron miles, pero jamás las envié. La vida se pasa rápido, y pronto pasó mucho.
Hoy que vuelvo a recordarla al encontrar mis cartas viejas me pregunto si estará viviendo en el mismo lugar. Tengo ganas de escribirle, pero hace tanto tiempo que me pidió que le escribiera que no sé si aun me recuerda, o si quiere saber de mí. No sé como empezar ni que decir; si bien mas vale tarde que nunca, esto ya es un abuso.
Un millón de cartas a medias y muy poco que rescatar. Hubiera sido más fácil decirle lo que sentía, y no esperar que se fuera lejos para empezar a extrañarla. Ahora es más difícil. Mañana será peor. Mejor me voy a dormir. Tal vez vuelva a soñar con ella.

Moraleja: las pastillas que te dan en los geriátricos te mandan a dormir temprano.Mas vale tarde...

E.M.B

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