Con un exprimidor ella vino hasta mi
Su limonada olí pero me disgustó
Que al exprimir arroz sólo quedó papel
Ya no hay tazas de té ni pócimas de amor
Sólo este frío café y afuera hace calor
Cierro los ojos y huelo el humo en su pelo
Aprieto mis puños y siento escurrir
El jugo de viejos limones secos
Mientras el exprimidor se aburre en algún rincón de la casa
E.M.B.
martes, 27 de octubre de 2009
martes, 13 de octubre de 2009
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